El martes 8 de febrero el CPEPA Sobrarbe ofreció un taller sobre el cambio climático en la localidad de Arcusa. La sesión fue gratuita y abierta a todo el público.
Gracias a la Diputación de Huesca que ha promovido estas sesiones y de la mano de Maite Buil, de Aviva Rural, todas las personas asistentes (una quincena) pudieron conocer por qué hasta hace poco se hablaba de cambio climático y ahora se habla de emergencia climática.
Como nos contó Maite, «este taller tiene como objetivos:
- comprender el fenómeno del cambio climático (sus causas y consecuencias), a partir de los datos científicos y experiencias de las personas asistentes;
- darnos cuenta del reto al que nos enfrentamos, ilusionar con el cambio que está por venir y buscar soluciones.
Con estas sesiones nos hacemos muchas preguntas: ¿para qué producimos gases de efecto invernadero? ¿quién emite más? ¿quién tiene más riesgo? ¿cuáles son las consecuencias? ¿qué podemos hacer?… Cuestionamos nuestra sociedad de consumo, que ha alcanzado su límite. Y nos planteamos este momento como una oportunidad para vivir de otra manera. Para ser protagonistas de nuestro propio cambio, y crear una sociedad más igualitaria, cuidadosa, y en la que seamos más felices.«
Así pues, desde este enfoque crítico constructivo, se trataron los principales factores que han llevado a la actual situación de emergencia climática que vive el planeta Tierra, sus causas, sus consecuencias… y el papel que los habitantes del «primer mundo» jugamos en este escenario.
Con este taller el CPEPA Sobrarbe buscaba, más allá de la divulgación y la concienciación (que, por supuesto, son esenciales para que pueda generarse un cambio), que las personas participantes indagáramos y nos planteáramos qué podemos hacer en nuestro día a día para evitar el colapso de nuestro planeta.
Y aunque el problema, en un primer momento de la reflexión, nos pareciera demasiado grande, demasiado global, demasiado complicado… lo cierto es que en la charla y en el debate simultáneo que fue surgiendo, pudimos identificar acciones/actitudes clave para crear el cambio necesario:
- consumir menos y consumir de otra forma: más local, con más conciencia de cómo se produce lo que compramos (si se hace en condiciones dignas, si se paga lo justo, si hay explotación infantil, etc.) y desde dónde viene;
- reactivar la economía circular: reutilizar, truequear, crear bancos de tiempo, pedir prestado, etc.;
- ser conscientes de nuestra fuerza como consumidores para provocar un cambio: dejar de comprar productos sobreenvasados, buscar productos a granel, evitar productos que impliquen deforestación, que no se produzcan en condiciones justas y dignas, etc.;
- generar nuevas iniciativas que trabajen de forma ecológicamente responsable y apoyar a las ya existentes en el territorio.
Este taller fue, por tanto, una semilla para la reflexión y nos invitó al decrecimiento y a crear comunidad.
Y aunque todo cambio cuesta, como dicen desde Aviva Rural: ¡Las pequeñas elecciones se convierten en acciones, las acciones se convierten en hábitos y los hábitos se convierten en nuestra forma de vida.!
A modo de conclusión, nos quedamos con la cita de Eduardo Galeano: Muchas personas pequeñas, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, pueden cambiar el mundo. ¿Te unes?